Y por fin, nos alcanzó el destino en la Ciudad de México… El fértil y bello Valle de México, compuesto por tres grandes lagos que dio de beber a los aztecas, los conquistadores, los revolucionarios, nuestros abuelos, padres, nosotros mismos… y nuestros hijos, se está agotando y no por una sequía extrema, sino por el mal manejo que hemos hecho del agua.
Como hemos escuchado, se realizará #MegaCortedeAgua del suministro del agua en la Ciudad de México, el 31 de octubre se suspenderá la alimentación del Cutzamala que no volverá a abrir la llave hasta el 4 de noviembre. Sin embargo, el suministro no se recuperará en su totalidad hasta el viernes 9. Este corte dejará sin una gota de agua a por lo menos 3 millones 850 mil las personas de 482 colonias de la Ciudad de México y afectará también a 13 municipios del Estado de México.
Cuatro días, 96 horas, en las que no vamos a recibir ni una gota de agua. Servirán para que experimentemos lo que le espera en un futuro cercano a la Ciudad de México. La escasez ya no es algo lejano que ocurre en Ciudad del Cabo, Suráfrica o en el desierto de Arizona… la falta de agua la tendrás tú, no saldrá líquido de tu llave y si no cuidamos nuestras reservas será nuestra realidad en menos de 20 años.
El 55% del agua que abastece a la ciudad viene de la reserva subterránea de la ciudad y al ritmo que la estamos extrayendo, según información del SACMEX, esta fuente de agua se puede agotar en 2040. Cada año que pasa, nuestro acuífero se agota y nosotros nos hundimos con el.
Debemos comprender lo que estamos haciendo mal, pero sobre todo lo que debemos cambiar y las acciones concretas que podemos realizar día a día para aliviar el estrés hídrico que vive nuestra ciudad y para el cual todos podemos aportar cambiando ciertos hábitos.
CONSEJOS DURANTE EL CORTE
1.- Antes de bañarte, coloca un balde bajo la regadera.
Así, al abrirla en lo que se calienta el agua no la desperdicias, la almacenas y puedes reutilizarla. Una vez caliente el agua remoja el cuerpo y cierra la llave. Enjabónate y usa el agua almacenada con una jícara o balde pequeño y para enjuagarte.
Te recomendamos también manejar un horario en la casa para el baño de todos y que sea en serie. Así aprovechas el agua está caliente y no desperdicias cada que alguien se baña.
Incluso puedes aprovechar la excusa para bañarte tarde, al medio día, así no tendrás que esperar a que caliente el agua.
2.- De ser posible no te bañes todos los días. No pasa nada, es un fin de semana al año.
Pero también, te damos una alternativa al baño de regadera diario: usa paños limpios húmedos para asearte el cuerpo con la menor agua posible. Le puedes poner algunas gotas de esencia o agua de colonia. Es una solución temporal durante el período de escasez que puedes convertir en un hábito.
3.- Recuerda que es mejor asignar un solo baño para hacer pipí. Evita vaciar el tanque del baño cada que haces pipí. Acumula, 3, 5 o más idas al baño y solo entonces jálale a la cadena. También puedes reutilizar el agua captada de la regadera para rellenar el tanque y jalarle cuando sea necesario.
4.- Reutiliza la mayor cantidad de agua. La de la lavadora, la que usaste para lavarte las manos y la de la regadera, puedes usarlas para limpieza de superficies agregando un poco de jabón o cloro y también para jalar el WC.
Ten a la mano una palangana para acumular los trastes del día con agua y jabón, y luego enjuagarlos con una jícara. Si esta idea no te gusta, entonces usa platos y vasos desechables de papel o algún material biodegradable.
5.- Comienza a captar agua de lluvia
Coloca el mayor número posible de cubetas en azoteas y patios para captar la lluvia disponible durante estos días de escasez. De ser posible, una vez que deje de llover almacénala en un solo recipiente y tápala, para que no se contamine de tierra, insectos y hojas que se encuentran en el ambiente. Esta agua la puedes usar para el WC y limpieza de pisos y superficies agregando un poco de jabón o cloro.
El mega corte al abastecimiento del agua potable en toda la ciudad termina el 4 de noviembre, pero el suministro se regularizará hasta el 9 de noviembre, aproximadamente.
Haz conciencia. Todos estos consejos son medidas temporales que pueden convertirse en hábito, y con ellos, la escasez de agua potable en la Ciudad de México puede empezar a tener solución.
¿Ya estamos listos para quedarnos sin agua?
Seguramente pensarás: ¿cómo es posible que haya escasez de agua en esta ciudad? Sobre todo, cuando ahora llueve casi todo el año y nos inundamos todo el tiempo. La respuesta es simple: no hemos sabido darle buen uso al agua. Desde nuestra casa la desperdiciamos, la descuidamos, la ensuciamos y la tiramos. Pero también hay grandes factores que desencadenan la escasez. Por ejemplo:
1.- La red de agua potable de la Ciudad de México está en tan mal estado, que se desperdicia el 41% de toda el agua de la ciudad en fugas.
2.- Los grandes consumidores de agua potable, como las industrias, no asumen una verdadera responsabilidad social en cuanto a la escasez de agua para la ciudad. Además no hay normas suficientes que los obliguen a tomar las medidas correctas para darle buen uso. No hay un programa claro de colaboración para proteger el acuífero de la ciudad.
Y 3.- Estamos desperdiciando toda el agua de lluvia, dejándola ir al caño.
¡Así como lo oyes! El agua de lluvia que nos cae todos los años, en vez de usarla, dejamos que se vaya al desagüe y provoque inundaciones porque el drenaje es insuficiente para el crecimiento de la ciudad y además tiramos basura a las calles que lo tapan. El agua de lluvia es un recurso sustentable. ¡Es una solución, no un problema! Captar el agua de lluvia a gran escala, permite que tengamos otra alternativa de abasto para usos como limpieza, baños, industria, etc.
De la misma forma, el agua que nos cae se puede llevar para recargar de nuevo nuestra gran reserva de agua subterránea, impulsando la infiltración por medio de pozos o jardines que regresen el agua al acuífero de donde se extrae el 55% del suministro de la ciudad. Y es fundamental que tengan un mantenimiento adecuado para que funcionen muchos años.
Y no se trata de que saques cubetas cada vez que llueve. Ya existen grandes soluciones que pueden ayudarnos a aliviar este gran problema de la escasez de agua potable.
Porque la escasez de agua potable en la Ciudad de México tiene solución.
Sígueme. Infórmate. Actúa.
Estas son Cápsulas de Agua, para que México viva.