“Si no empieza a haber un consumo más racional del agua, el país enfrentará en breve una situación inimaginable de crisis e ingobernabilidad, tomando en cuenta que el primer trimestre de 2011 ha sido el más seco de toda la historia”, advirtió el director de la Conagua, José L. Luege T.
El funcionario advirtió que de los 78 mil 400 millones de metros cúbicos de agua que se consumen en el país cada año, la mayoría se obtienen de forma no sustentable, es decir, mediante la sobrexplotación de cuencas y mantos acuíferos subterráneos.
De acuerdo con Luege, hay un déficit en la disponibilidad del líquido de 11 mil 500 millones de metros cúbicos, pero dentro de 20 años ese índice podría llegar a 29 mil millones e inclusive a 36 mil millones, si se acentúa el cambio climático.
Además, informó Luege, las temperaturas de 35 grados centígrados o más van a continuar durante las próximas semanas en casi todo el país, aunque se espera que la temporada de lluvias comience con anticipación.
Asimismo, señaló que el crecimiento de la población obliga a los gobiernos a realizar obras hidráulicas igualmente grandes, y a avanzar en el uso de mejores técnicas para cuidar el agua disponible.
Fuente: La Jornada
Por: Fernando Camacho Servín
Este aumento en las temperaturas está demostrando que las estaciones son cada vez más extremas e impredecibles. A temporadas de calor extremo le siguen temporadas de lluvias intensas que caen en menor tiempo, situación que si no se previene puede ocasionar inundaciones.
En otra noticia publicada esta semana daban pistas sobre una de las posibles soluciones:
Solución para el agua en DF: infiltración
El investigador de la UNAM, Luis Zambrano González, indicó que en México se olvida que el agua es un recurso limitado, por varias técnicas las autoridades locales y federales se han empeñado en desalojar las aguas de la cuenca del Valle de México con obras como el Tajo de Nachistongo y del Drenaje Profundo, han hecho obras de relumbrón, dijo, pero sin resultados, pues han ignorado que es mejor infiltrar el agua de lluvia al subsuelo, lo que alimentaría los mantos acuíferos de toda la Ciudad de México.
Fuente: El Punto Crítico
Diego Rivero Corona