El equipo de transición de Enrique Peña Nieto, así como otras instituciones, trabajan para formar la Secretaría del Agua, de acuerdo con el director de la Asociación Nacional de Empresas de Agua y Saneamiento (ANEAS), Roberto Olivares.
ANEAS entregó a Peña Nieto, antes del inicio formal de la campaña presidencial, un documento en el que participaron 35 especialistas, en el que se incluye la creación de la Secretaría del Agua, la cual deberá contar las áreas de investigación, regulación, administración del agua y financiamiento.
Olivares declaró en entrevista para Grupo Reforma que al crear una Secretaría de Agua se le está dando prioridad a este recurso que se considera de seguridad nacional. Asimismo, señaló que dicha medida servirá para cumplir los objetivos de abasto y saneamiento de la Agenda del Agua 2030, establecida por el presidente Felipe Calderón.
El la entrevista citada el Director de ANEAS, aseguró que la creación de dicha dependencia es necesaria para combatir el atraso de aproximadamente 2 billones de pesos de inversión en infraestructura. Sin embargo, Olivares reconoció que hacerla posible implicará un proceso complejo. “Le corresponderá a Peña Nieto y al gabinete. Es un proceso pesado. Hay que pasarlo por el Congreso y por todo un esquema de andamiaje administrativo y legal jurídico. Requerirá de un plazo largo para poderse instrumentar”, apuntó.
Lo que se requiere, indicó, es un órgano con capacidad para instrumentar una verdadera política de Estado en materia hídrica y mayores atribuciones para regular el sector, además de adoptar las medidas necesarias para atender las crecientes necesidades que, en este renglón, tiene el País.
El también maestro en Administración Pública consideró que la creación de la nueva Secretaría debe ir acompañada de modificaciones legales para involucrar a los estados en la vigilancia de los recursos hídricos y facilitar alianzas entre los municipios para brindar los servicios de agua potable y saneamiento
Olivares agregó que la creación de la nueva secretaría se debe acompañar por modificaciones en aspectos clave de la gestión del agua como la vigilancia del manejo de los recursos hídricos y la responsabilidad de los municipios en la prestación de servicios. “Debe cambiar el modelo actual de prestación de servicios de agua y saneamiento, debe modificarse, se debe revisar la atribución a nivel municipal y que se dé un margen de maniobra para esta pueda ocurrir en distintos niveles: municipal, intermunicipal, estatal o regional”.
Fuente: Daniela Rea /Agencia Reforma
