El 23 de marzo, como parte de las celebraciones del Día Mundial del Agua, el Presidente Felipe Calderón estableció de forma oficial el Acuerdo por el agua 2030, que busca poner en marcha la Agenda presentada el año pasado.
La Agenda del Agua 2030 es una estrategia elaborada por CONAGUA, en la cual se plantea en un lapso de veinte años conseguir un país con ríos limpios, cuencas y acuíferos en equilibrio, cobertura universal de agua potable y alcantarillado, y asentamientos seguros ante inundaciones catastróficas. Define la brecha existente entre tal visión y la realidad actual, y prioriza las líneas de acción que es necesario desplegar para conseguirlo.
En el evento que tuvo lugar en la fuente de Tláloc ubicada en el Bosque de Chapultepec, el Director General de la Comisión Nacional del Agua, José Luis Luege Tamargo declaró que la Agenda del Agua es la prospección de un México que va encaminado a alcanzar una gestión sustentable del agua, presentando rutas claras y objetivos precisos, partiendo de estrategias para una política a largo plazo cuyo objetivo principal sea la cobertura universal pero por medio de una gestión integrada y respetuosa con el medio ambiente de las cuencas y acuíferos.
Por su parte el Presidente Felipe Calderón, hizo una reflexión sobre el mal manejo que se ha estado haciendo del agua en México y la importancia de revertir esta situación, señaló como dato alarmante que entre mediados siglo XX comienzos del XXI, el agua por habitante pasó de 31.000 m³ a 10.000 m³, lo que significa que el país en la actualidad se encuentra en una situación de estrés hídrico. Resaltando el caso del Distrito Federal en donde la sobre explotación de los mantos acuíferos está llevando a que, por un lado, cada vez sea extraída el agua a mayor profundidad en promedio 500 m bajo tierra, lo que está contribuyendo al hundimiento de la ciudad; y por otro lado, se está trayendo agua de más de 200 kilómetros, desde Michoacán, y teniendo que elevarla a 1.000 metros de altura, para abastecer el suministro de la zona metropolitana del Valle de México. Algo inconcebible, si se tiene en cuenta que el Distrito Federal recibe un promedio de 700 mm de lluvia al año que es desperdiciada.
Calderón declaró que el tema del agua es de Seguridad Nacional, lo que implica un cambio en la cultura y la utilización del recurso. Para lo cual es necesario hacer frente a problema fundamentales como: el abatimiento de los acuíferos, el abastecimiento de agua para las ciudades, mejorar los sistemas de riego buscando la eficiencia hídrica y energética, aumentar plantas de tratamiento de aguas negras, y el incremento del servicio de alcantarillado y agua potable. También declaró que el correcto uso del agua es un reto complejo a largo plazo que implica a todos los sectores de la sociedad.
Por último señaló 5 estrategias fundamentales en las que se centra la Agenda del agua 2030:
- Una gestión sustentable y equilibrada de las cuencas y acuíferos del país.
- Acciones e iniciativas encaminas a mantener los ríos y lagos limpios. Tomando como meta el saneamiento del 100% de aguas residuales.
- Cobertura universal de agua potable y alcantarillado.
- Seguridad ante inundaciones y otros fenómenos meteorológicos. Asegurando una buena infraestructura y evitando los asentamientos irregulares en zonas peligrosas.
- Recursos financieros, tecnológicos y científicos para alcanzar un uso sustentable del agua.
El Acuerdo para el agua 2030, busca que este recurso fundamental para que haya vida, sea distribuido en cantidad y calidad suficiente. Ya que la disponibilidad hídrica asegura el bienestar, la paz y la posibilidad de desarrollo. Para cumplir con las estrategias trazadas y con todo lo que se propone la Agenda del agua 2030, es más que necesaria una gestión sustentable del agua de lluvia.