José Luis Luege, director de la Conagua, dio a conocer que fue terminado un primer tramo del Túnel Emisor Oriente (TEO). Agregó que esta obra es para evitar grandes inundaciones en el DF, pero las pequeñas se tendrán que tratar a nivel de los municipios.

El TEO, es la cuarta ruta de salida del drenaje metropolitano, 2.7 kilómetros, entre la Lumbrera 0 (en el cruce de Periférico y Gran Canal) y la lumbrera 1A en Ecatepec. Según el funcionario, este tramo aportará 20 por ciento de capacidad adicional al sistema de drenaje de la Zona Metropolitana. Los primeros 10 kilómetros del ducto entrarán en operación a finales de 2012.

El Túnel Emisor Oriente (TEO), la obra hidráulica más importante de la Administración federal, resolverá el riesgo de una gran inundación en la Ciudad de México, para resolver un problema muy grande, la seguridad de la ciudad, de 20 millones de habitantes, queda garantizada, afirmó el director de Conagua. “fue diseñado, subrayó, para evitar una inundación generalizada en torno al Centro Histórico o el Aeropuerto, las zonas más afectadas por el hundimiento en la Capital. Pero corresponde a las autoridades locales desarrollar soluciones para evitar los encharcamientos”, expuso Luege.

A lo cual agregó: “Esta obra fue diseñada para dar seguridad a la Ciudad, pero no me pidan que por falta de recolección de basura y de limpieza en las calles, evitemos las inundaciones normales, que ahora llaman encharcamientos; eso es un problema que compete a las autoridades locales, a los Jefes Delegacionales y al Jefe de Gobierno”.

Recordó que al final del TEO, en territorio del Estado de Hidalgo, se construye la planta Atotonilco, la cual limpiará parte de las aguas negras desechadas por la metrópoli para que los agricultores hidalguenses reciban un caudal que riegue cultivos sin riesgos para la salud. El funcionario acusó al Distrito Federal y al Estado de México de ser omisos en lo que a tratamiento de aguas residuales se refiere, pues ninguna de las dos entidades han construido instalaciones similares para reusar el agua.

El TEO permitirá compensar la pérdida, cada vez mayor, de la capacidad de desalojo del Gran Canal del Desagüe y dar mantenimiento mayor al Drenaje Profundo.

En 5 años, $54 mil millones se han invertido para reducir el riesgo de que ocurra una gran inundación: El TEO, cuesta $19 mil millones. Además, se construyen dos megaplantas de bombeo para sacar las aguas de la Ciudad: Casa Colorada y El Caracol. Y en febrero se abrirán 10 km  del Túnel Interceptor Río de los Remedios. Por último, se está construyendo un túnel de 6.7 km, debajo del Canal de la Compañía, así como su planta de bombeo, La Caldera que están ya en operación.

Fuente: Reforma

Como bien dice el director de la Conagua, todas estas mega obras pueden servir para evitar una inundación catastrófica, sin embargo las “pequeñas” inundaciones que afectan cada temporada de lluvia  a distintas zonas de la ciudad no quedarán resueltas. Por esta razón, las grandes obras deben ser combinadas con soluciones más pequeñas, de control y almacenamiento en calles y estacionamientos, así como sistemas para limpiar el agua de lluvia para su reúso o incluso para infiltrarla en los mantos acuíferos. Así como se están construyendo obras gigantes para desalojar las excedencias, también se deben promover soluciones más pequeñas para aprovechar el agua de lluvia.